¿MIRANDA MASÓN?
Según algunos
tratadistas del tema, el interés de Miranda por ese conocimiento se pudo haber
originado en Gibraltar, al inicio de su amistad con John Turnbull quien fue su
amigo durante gran parte de su vida, prolongándose a su hijo para la época en la cual, prisionero en la
Carraca, Miranda solicitaba ayuda económica. Ser masón era una moda y en ella
participaron científicos, reyes, políticos y hasta sacerdotes. Angello
Roncalli y Giovanni Montini,
respectivamente Juan XXIII y Paulo VI y hasta Mario Bergoglio, el actual Papa
Francisco han sido señalados como pertenecientes a esa sociedad.
No obstante,
entre los papeles de Miranda no existen indicios de que hubiese pertenecido a
alguna sociedad de esa índole. Hay un alegato para justificar ese
comportamiento pero hay carencia de sentido en ello, si atendemos que la
masonería fue perseguida donde el catolicismo tenía poder y eso solo existía,
tomando en cuenta las permanencias dilatadas de Miranda, solo en España. Una
larga lista de historiadores venezolanos y extranjeros se inclinan a favorecer
esa teoría entre ellos Mariano Picón Salas, Mario Briceño Perozo pero otros lo
contradicen como ha ocurrido con Caracciolo Parra-Perez. Largo sería citar la
bibliografía correspondiente al tema.
Se ha
escrito sobre la fundación en Londres de la denominada “Logia Lautaro o
Caballeros Racionales” la cual se expandió a España y a sus colonias. Como
pertenecientes a estas logias son citados Bolívar, San Martín, O´Higgins,
Nariño, el canónigo Madariaga, etc. Pero hay contradicciones entre los
encuentros de Miranda con muchos de los citados. Parra-Pérez expresa que
“Poquísimos fueron, en realidad, los ibero-americanos que en Londres entraron
en contacto personal con Miranda” Esta posición también es sostenida por la historiadora Carmen Bohorquez Morán,
quien señala la imposibilidad de coincidencia entre los itinerarios de cada uno
de los citados y la permanencia en esos lugares de Miranda. Tratando el tema
esta historiadora se extiende por más de 20 páginas de su obra, refutando lo
masón de Miranda.
Indudablemente
las conspiraciones protagonizadas por Miranda eran de carácter secreto lo cual
no significa sociedad masónica. La aseveración de Miranda masón puede ser un
protagonismo de las sociedades masónicas para dar lustre a las mismas con la
inclusión de un histórico y trascendente personaje. Nunca han dejado de poner
en relieve la intervención de la masonería como organización en los movimientos
independentistas, cuando en el fondo solo se trató de la intervención de
algunos de sus miembros en esos actos sin seguir lineamientos de orden
jerárquico “programado” por las logias a las cuales han estado afiliados.
La
palabra “Lautaro” utilizado para denominar la logia presuntamente fundada por
Miranda corresponde a la identidad de un líder mapuche con una participación
entre los años 1552 al 1557 en la denominada “Guerra de Arauco” entre la
Capitanía General de Chile y grupos rebeldes de aborígenes.
Si
algo que puede ser tan importante para un ser humano como es una posición
religiosa o filosófica vale la pena preguntarse ¿Porqué no hay indicios?
Posiblemente en el caso de Miranda la masonería fue un escudo o una cortina de
humo para contar con una red eficiente de comunicación amparada por
obligaciones morales y juramentos de fidelidad y confidencialidad. Ilustrativa
es la lectura de la obra de Miriam Blanco-Fombona de Hood El enigma de Sarah Andrews, esposa de Francisco de Miranda relativa
a la masonería mirandina: “Recordemos que los masones de Inglaterra no
consideran a Miranda verdadero masón (true mason), porque lo que hacía era
utilizar las reglas masónicos para promover el movimiento político de
independencia en Sur América. La verdadera masonería de Sur América la llevaron
los oficiales ingleses, cuando fueron a combatir por nuestra independencia. Así
lo ven hoy los masones ingleses y estoy de acuerdo con ellos”.
En el
año 1950 Miranda fue “decretado” como masón por el Gran Maestro de la Gran Logia de Venezuela
José Tomás Uzcátegui. En ese decreto se puede leer que solicitaba la búsqueda
de documentación que demostrase vínculos de Miranda con la masonería. Han
transcurrido casi 70 años sin que se encuentren indicios que prueben la
masonería mirandina.
Eloy Enrique
Reverón García, en su blog “Gran Logia de la Investigación”comentó sobre el
tema lo siguiente: “No hablo como
historiador ortodoxo, hablo como un investigador especializado en el tema. En
1990, realicé el levantamiento del Archivo de la Logia Esperanza de Caracas.
Clasifiqué sus minutas, actas, correspondencia fechadas desde el 27 de
diciembre 1853 y encontré que la primera vez que apareció el nombre de
Francisco de Miranda fue para archivar el decreto del Gran Maestro, que de paso
declaraba la fecha del nacimiento de Miranda, a partir del bicentenario, Día
Masónico Nacional.
El Historiador masón, miembro de la Ars Quatour
Coronaty de Londres, quien escribiera un trabajo sobre Bolívar Masón, donde
reproduce una copia certificada del acta de su recepción al grado de compañero.
Publicó otro sobre Miranda donde admite no haber encontrado motivo alguno para
pensar que Miranda hubiera pertenecido a la Masonería, y que eso no le restaba
ningún mérito como personaje histórico. Vale recordar que el acta original que
reprodujo relativa a Bolívar está en Caracas, sin embargo no halló ningún
rastro masónico de Miranda.
En
conclusión, calificar como masón a Miranda no ha sido más que una creación, decretada sin bases
documentales, llevada a cabo tal vez para realzar el prestigio de la sociedad
masónica.
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